lunes, 2 de noviembre de 2009

CAMINAR SIN MIEDO


Si nos tomamos un poco de tiempo y nos dedicamos a ver la publicidad con que se nos "bombardea" y que mueve nuestro mundo económico, veremos que gran parte de ella se basa en la generación de expectativas que nacen en nosotros producto de nuestras inseguridades o de algún miedo latente o inexpresado.

En las campañas publicitarias pareciera que si compráramos tales o cuales productos, la vida se nos mejorará como por arte de magia, instantáneamente. Pareciera que todos nuestros deseos de aceptación, de ser queridos o apreciados, se lograrán por el uso de tal o cual crema antiarrugas, o por el nuevo color de pelo, o por las nuevas ondas sedosas, o por el nuevo tipo de pantalón o zapato, etc...

Claramente una sociedad que sobreexcita la sensación de miedo, logra que los seres humanos reaccionemos de forma muy agresiva (pelear) o simplemente que nos evadamos (arrancar).

Esta situación humana "reactiva", propiciada para prolongar nuestros miedos, no permite el desarrollo de valores humanitarios, de principios de hermandad, de fraternidad, de respeto por el otro, simplemente porque estamos ocupados de huir o de pelear, pues para nosotros - en nuestro subconciente - estamos en un peligro "vital".

Yoshua Emmanuel fue capáz de vivir sin este miedo que lo deshumanizara, todo lo contrario, Él se transformó en el paradigma de humanidad al vivir centrado en sí mismo y con clara conciencia de AMOR a sí mismo y a los demás.

Él vivió sin miedos, abierto a la voluntad de Dios y cumpliendo lo que dictaba su corazón formado en la libertad de haber podido conciliar con sabiduría el "sí se puede" con el "no se debe".

Definirse "cristiano" implica necesariamente aprender a vivir centrado en sí mismo, sin miedos y con nuestra conciencia abierta al AMOR.

Lo maravilloso de esto, es que este camino está disponible para todos nosotros y sólo requiere de nuestra parte la voluntad de hacerlo. Podremos....??

No hay comentarios: